UNA MARIPOSA EN EL JARDÍN

 

La mariposa revoloteaba sobre el jardín y ella la contemplaba absorta en sus pensamientos.

Qué belleza y cuánto me gusta que este aquí y poder contemplarla. Me gustaría una conexión telepática con ella, pero quizás no sea posible. Todavía los humanos estamos lejos de lograr esa conexión con el resto de los seres vivos que habitan nuestro planeta. Probaré a ver si lo consigo, seguro que ella que ha vivido una verdadera metamorfosis me aportará una información maravillosa.

Noto desde mi corazón que sintonizo con ella, siento lo sutil y fugaz que es su existencia y en ese vuelo que me embeleza, me trasmite esa serenidad de una verdadera transformación para una vida en un tiempo tan corto.

Que fragilidad y que cambios tan rápidos para seguir su existencia sobre esas plantas donde deposita sus huevos para que de nuevo, vuelva a comenzar la vida en otras mariposas idénticas y siempre conectadas con su bella manera de existir.

Recuerdo aquel día que rescate a una que no podía volar porque su cuerpo se había mojado, cuanta energía amorosa le transmití cuando posada en mis manos e indefensa, intentaba que el sol la secara y pudiese volar de nuevo. Al fin, cuando elevó su vuelo después de varios intentos, nos despedimos con alegría y le deseé mucha suerte en su corta y larga vida.

Porque lo que no estoy segura es si nosotros realizamos esa metamorfosis capaz de ver el mundo desde distintos planos,!!! cuanta sabiduría adquirida en su existencia.!!! 

Seguramente lleva incorporado esas vivencias de sus antesesoras y la trasmite a su futura descendencia. Cuánto tengo que aprender de ella, para poder hacer esa metamorfosis que me permita al menos ser igual que ella.

Y en ese momento ella voló hacia mi y se posó en mis manos, lo viví como un darme las gracias, una conexión que me demostraba que nos habíamos entendido.  Emocionada la vi partir hacia su cometido en esta corta o larga vida. GRACIAS.